Tavernes de la Valldigna, 3 de la madrugada. Navego por distintas webs recopilando información sobre un tema para un documental que realizo en mi canal de YouTube cuando, de pronto, me topo con una publicación de LinkedIn: La productora "La Fábrica de la Tele" busca incorporación inmediata para el cargo de redacción en un programa de televisión.
Teniendo algunos conocidos que trabajan en la productora, decido preguntar el programa en el que se buscaban esas personas. Los primeros a los que pregunto no lo saben, pero los segundos ya me dan una respuesta: 'Sálvame Diario'.
Siendo uno de los programas que más he seguido en mi adolescencia, haciéndome interesar por la prensa del corazón, y que llegaron a hacer que trabajara en una de las principales cabeceras de prensa rosa del país, me dispongo a mandar el currículum y tirar un poco de contactos para que llegue a la cúpula de la productora.
Efectivamente, estos lazos llegan a lo más alto y en menos de dos horas recibo una llamada para convocarme a una entrevista de trabajo. ¿El problema? Que es ese mismo día, a las 16:00 horas. Son las 13:00 de la mañana. Imposible llegar a Madrid en ese espacio de tiempo, pues está a más de 400 kilómetros de mi casa. Pregunto si la entrevista puede ser al día siguiente. Ante la respuesta afirmativa, pido a mis amigos que viven en Madrid que me dejen dormir una noche en su sofá.
Al día siguiente, tras salir de casa nervioso ante la posibilidad de trabajar en el programa de mis sueños, hago 400 kilómetros en coche y me planto frente a las instalaciones de Mediaset España para realizar la entrevista que está a punto de cambiar mi vida.
En una sala donde habitualmente se realizan las reuniones del programa, me siento junto a Angelines, la jefa del equipo de investigación del programa, y Rafa, su ayudante. Tenemos una conversación de lo más amistosa y ven mi pasión por el formato y mis altos conocimientos en la materia, a pesar de no ser muy mayor. Me dicen que al día siguiente me dan la respuesta.
Termino la reunión, y antes de abandonar las instalaciones, me paso por el plató del programa a saludar a algunos conocidos que han hecho el favor de entregar mi currículum. Me desean suerte, aunque me dicen que no la voy a necesitar. Efectivamente, no pasan ni cinco minutos que abandono Mediaset, cuando Angelines me llama de nuevo al teléfono: "Mira, he visto a otra gente, y tenía más pendientes para esta tarde, pero voy a anular sus entrevistas. No me podía esperar hasta mañana para decírtelo. Nos ha gustado muchísimo tu actitud y cómo te hemos visto: estás contratado".
Cambio radical de vida. Cuando hice los 400 kilómetros de Valencia-Madrid pensaba en que podía entrar a trabajar en el sitio. En los 400 de vuelta, pensaba el cambio de 180 grados que iba a dar mi vida. Era un jueves. Querían que me incorporara el lunes siguiente.
Mi economía en ese momento no pasaba por un momento boyante, por lo que decidí alquilar mi piso, lo que suponía tener que hacer una mudanza de mis cosas a casa de mis padres, y preparar la poca mudanza que podía hacer a Madrid en 3 días. Conseguí finalmente que me dejaran incorporarme el miércoles. Así que en ese espacio de 6 días realicé todos los trámites necesarios.
Mi vida cambia por completo, y a pesar de no conseguir un apartamento rápidamente, mi tío me acoge unos días en su casa mientras trato de buscar algo rápido. Mientras, empiezo a conocer a mis compis de programa: algunos que ya conocía por redes y con los que no me costó nada conectar, otros nuevos que me recibieron con los brazos abiertos, y otros a los que veía desde casa desde hace muchos años y me que causaron mucho respeto al conocer. Entre ellos, destaco a Miguel, quien me enseñó todo lo que debía hacer y con quien formé el tándem perfecto.
Pero tras una semana de trabajo en el programa, llega la peor de las noticas: tras 14 años de programa en directo, Mediaset decidía cancelar el formato por la espalda, sin comunicárselo antes a los jefes. La noticia se hace pública a través del periódico El Mundo, y es así como nos enteramos de nuestro despido.
Pero lo peor no es ser despedido y enterarse por el periódico, sino que la agonía se mantenga: el programa no terminaba hasta un mes después de darse a conocer la noticia. Los ánimos en esa redacción era los peores del mundo. La gente empezó tomándoselo todo con humor (se puede comprobar visionando los primeros programas que hicimos tras enterarnos de la cancelación), pero poco a poco esas risas se diluyeron y todo se convirtió en hartazgo. La gente no quería seguir haciendo un programa con fecha de caducidad. Nos estaban cortando las alas poco a poco, y la gente lo sabía.
Y finalmente, un 23 de junio de 2023, una parte de la historia de la televisión española se apagaba. En medio de una fogata en la que ardieron algunas partes del plató (en homenaje a la noche de San Juan), 'Sálvame Diario' se apagaba para siempre, dejando a más de 150 trabajadores en el paro.
Pero la mala noticia duró poco: Netflix acudía al rescate de 'Sálvame' y decidía producir un formato tipo reality en el que ocho colaboradores del espacio se marchaban a Latinoamérica a buscar trabajo en el otro lado del charco. Así, gran parte de los trabajadores del formato consiguió un nuevo empleo, que por el momento, parece que tendrá continuidad, viendo los grandes datos que ha conseguido en su estreno, situándose entre los primeros espacios del top de la plataforma de streaming en las primeras semanas de su llegada.
Y una vez llegada a su fin esta historia, podemos ver la comparación de la narrativa con la estructura del viaje del héroe. Fue una historia que me cambió radicalmente la vida, tal y como lo hace en el viaje del héroe, y que me hizo evolucionar como persona, adaptándome a diversos ambientes y enfrentándome a problemas que se me iban presentando según se iba desarrollando.
Con respecto al acto de tomar la decisión de irme a Madrid y cambiar mi vida por trabajar en el programa, aunque fue algo que tomé relativamente rápido, si es cierto que tuve que plantearme diversos aspectos de mi vida, pues en esos momentos tuve que dejar cosas a un lado, sacrificándolas para emprender una nueva vida con nuevas posibilidades.
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